sábado, 3 de mayo de 2014

Taxis a domicilio 1906



Ya en esta época se pensaba en cambiar algunas formas de transporte público en la ciudad de Santiago. Para esto, personas particulares importaron una gran variedad de coches tirados por caballos. Como leemos aquí, el sistema de “taxis” de arriendo no es nada nuevo, ya se ha utilizado y lanzado en otras ciudades y aun hoy conservan este nombre.

 

 
EMPRESA NACIONAL DE CARRUAJES “REMISE” (*)

Se ha venido dando cuenta detallada en la prensa, y con general aplauso, de la formación de una sociedad de carruajes, destinada a implantar en Santiago un elegante y cómodo servicio de coches de alquiler, cuyos modelos han sido elegidos entre los mejores que hoy día usan en Londres y Paris.
 


Era tiempo ya que de nuestras calles desaparecieran esos viejos coches que por sí solo constituyen el peor de los servicios públicos y que, en su lugar, circularan carruajes cómodos, decentes y en relación con la categoría de una ciudad que cada día realiza mayores esfuerzos por alcanzar, en cuanto le sea posible, los progresos de las grandes capitales.

En estas, los particulares, renunciando a tener carruaje propio, lo tienen por medio de las cocherías o “remises”, que por sumas determinadas ponen a disposición del público toda clase de carruajes equipados con irreprochable elegancia. El dueño de la “remise” corre con todos los accidentes, las multas y las dificultades con la policía. El coche de “remise”, para el uso particular, está triunfando en todas las capitales europeas. En Buenos Aires lo mismo. Allí existe la gran cochería de M. Miras, con un capital de varios millones.
 


Desde hace algún tiempo se ve que en Santiago el público ocupa con preferencia para sus paseos el carruaje  tomado en cochería. De estos establecimientos hay muchos, pero son deficientes, pequeños y mal servidos. Todos estos inconvenientes vendrán a quedar satisfactoriamente subsanados con los servicios de la nueva “Empresa Nacional de Carruajes”. Sus organizadores se han guiado por los mejores prospectos de otras grandes capitales y todo induce  a augurar el más brillante éxito a la Sociedad. Los nombres de distinguidas personas que figuran en el directorio son, además, para el público una garantía segura de la seriedad y corrección del servicio.


Entre las innovaciones que para la mayor comodidad del público introducirá la Empresa, figuran las tarjetas de abonos para un número determinado de servicios y con su correspondiente descuento. Anexa a la cochería se instalara por cuenta de la Empresa, talleres de talabartería, cerrajería y lavandería, escuela para cocheros y además una caja de ahorro para estos, sujetándose a las prescripciones que sobre la materia ha fijado la ley.


Los dibujos reproducen una idea clara de la excelencia de los carruajes que entregara el servicio público de la Empresa Nacional de Carruajes Remise.


 


NOTA
(*) Un remís actual (del francés remisse, "enviado", coche de arrendamiento con chófer) es un servicio de transporte público usado en Argentina y Uruguay. Es un automóvil con conductor (denominado remissero) que se alquila para llevar tres o hasta cuatro pasajeros. Normalmente se alquila para recorrer trayectos cortos o medianos dentro de las poblaciones, aunque a veces se los utiliza para viajes largos, o para varios viajes dentro de una misma zona pero durante toda una jornada laboral.

La principal diferencia entre los remisses y los taxis es que los segundos tienen legalmente la posibilidad de ser parados en la vía pública por pasajeros ocasionales, y su cantidad suele ser limitada por leyes o reglamentos; en cambio los remisses se toman en la agencia o se piden por teléfono. Los remisses, a su vez, pueden no tener un color especial ni un letrero.

Revista Zig-Zag, junio de 1906

Los Baños de Apoquindo



 
Los baños de Apoquindo eran baños termales, situados en la Sierra de Ramón, localizados en el extremo norte de la falla de Ramón, en la zona de Apoquindo entre el cerro Apoquindo y el cerro Los Rulos llamado también Loma de los Baños.

Origen geológico de las aguas termales
La presencia de estos baños termales se debe a la existencia de la falla de Ramón, una falla geológica del tipo inverso que se encuentra activa y que atraviesa toda la zona del Apoquindo en sentido norte-sur. Prueba de esta actividad fue el sismo de 4,7° Richter, registrado el día 27 de noviembre de 2010, con epicentro en una zona residencial de San Carlos de Apoquindo a 101,2 kilómetros de profundidad.
El origen de estas fuentes se debe a la filtración de aguas percoladas en la corteza terrestre que retornan a la superficie luego ser calentadas por un foco de calor que se encuentra a más de 20.000 metros de profundidad. El agua recolecta en su trayectoria parte de los componentes solubles presentes en las rocas. La infiltración en la roca se debe a las fracturas verticales que presenta la corteza debido a la acción de levantamiento que tiene la falla en la sierra de Ramón.
 

Descripción de la imagen. La placa Sudamericana genera una zona de acumulación de energía, cuando esta se libera levanta la sierra de Ramón. Esta misma energía genera fuentes hidrotermales, el agua de las lluvias se filtra desde el nivel freático en el terreno fracturado y permeable por las fallas verticales, baja hasta una zona de acumulación de energía donde se calienta, y luego sube producto de su alta temperatura por fisuras emanando como una fuente hidrotermal.


Durante el siglo XIX y principios del siglo XX existían 4 manantiales de agua mineral que presentaban temperaturas entre los 18º y 23º. La existencia de estas vertientes llevó a la creación de un balneario termal llamado los Baños de Apoquindo en la década de los años 20  y que estuvo en funcionamiento hasta 1945. Además del agua mineral de estos manantiales fue embotellada hasta la década de los años 50 bajo la denominación de Vital Apoquindo. Mediciones hechas en el transcurso de 139 años permiten afirmar que son aguas cloruro-calco-sódicas cuyos componentes más significativos son cloruros 700 ppm y sodio 200 ppm, tienen una temperatura promedio constante de 22° Celsius y su pH es de 7,1.

Wikipedia. Baños de Apoquindo

 
Historia
Estos baños estuvieron activos desde 1840 hasta 1942. Diversos autores los describen. El primer relato es de Tornero en 1872 y define 4 fuentes principales: Cañita, Piedra Litre y Hierro. Darapsky en 1890 hace por primera vez un análisis físico químico de estas aguas. Existen distintos relatos y algunas fotos provenientes de finales del siglo XIX y de la primera mitad del siglo XX , de que en la zona de la Avenida Vital Apoquindo con la intersección de la Avenida Cristóbal Colón , en los terrenos del nuevo hospital de carabineros existió un balneario termal venido de una vertiente cordillerana. Existían avisos en la prensa, en la que se ofrecían sus baños termales y de barro. Hasta hace dos décadas aun se podían ver algunos restos de estos baños en la quebrada que queda al norte de dicho Hospital Este lugar se denominó los “Baños de Apoquindo”. En una época, los Baños elaboraron un agua mineral llamada Vital Apoquindo, de donde sale la raíz del nombre de la Avenida Vital Apoquindo.
Cuando muere Rosa Montt en 1919, Roberto Guzmán Montt, se adjudicó la Casona de Santa Rosa de Apoquindo, quedando los baños de Apoquindo en comunidad entre los hermanos Guzmán Montt, quienes evaluaron las vertientes naturales y construyeron instalaciones para habilitarlas. Sus amigos y familiares iban a bañarse a unas piletas de piedra que se llenaban con las saludables aguas. La fuente llamada El Sapo por los locales, desde la época prehispánica era objeto de culto y peregrinaciones por sus cualidades curativas.
 

 
Hotel Apoquindo
El balneario estaba en lo que fuera la propiedad rural de la familia Guzmán Montt, en el Fundo Santa Rosa de Apoquindo. Ahí funcionaba también el Hotel Apoquindo, rodeado de árboles, con un jardín para pasear, una laguna, restaurante y alojamiento en casas independientes ordenadas en hilera en la dirección de la quebrada. Se han efectuado planos de la zona en 1950.

“La gente también iba en caballos y carretas. El hotel era una estupenda instalación, campestre y sólida, con comedores y terrazas bajo los árboles. Mirando fotografías de la época no se puede creer, porque parece una imagen de los Alpes”, De hecho, desde calle Catedral esquina Puente salía diariamente una carretela a las 9 de la mañana con destino a los baños, que eran en la época una de las atracciones importantes de los alrededores de la capital. Incluso para el Centenario se pensó en construir tres caminos que unieran el centro con las zonas rurales: uno para Maipú, otro para San Bernardo y un tercero para los Baños de Apoquindo.

Historiador Miguel Laborde, académico de la Universidad Diego Portales.


 
Agua Vital Apoquindo
A 1,5 kilómetros al sur de los Baños de Apoquindo se encontraban las instalaciones en las que se envasaba agua mineral con el nombre de Vital Apoquindo, la que daba el nombre a la Avenida Vital Apoquindo. En 1950 fueron desmanteladas.

 
Publicación
En el año 1913, se hacía mención a unos baños termales  que estaban ubicados muy cerca de Santiago, exactamente en el sector  de Apoquindo.
Hoy en día no queda ni el recuerdo de estos, sólo tenemos el nombre y donde estuvieron ubicados físicamente.
Se puede decir que a las puertas de Santiago existe hoy día el mejor establecimiento para pasar las molestias de esta época de calor con toda clase de comodidades.
Los baños de Apoquindo ocupan un sitio por demás pintoresco y en el cual la naturaleza ha hecho un verdadero lujo de belleza.
El propietario de los baños no escatima sacrificios de ningún género a fin de que las personas que van a su establecimiento sean perfectamente atendidas.
En materia de servicio de restaurant, vinos y licores nada hay que desear. En cuanto al clima nada que decir. Apoquindo ha sido siempre recomendado por los mejores médicos.
Se siente una temperatura muy agradable, que hace que el tiempo que se está en los baños sea muy saludable. Respecto a las comodidades que presenta el hotel, debemos hacer presente que sus habitaciones son muy higiénicas, tanto por su aseo como por su ventilación.
Como ya lo hemos indicado, su proximidad a Santiago, hace que estos baños sean el sitio preferente de vacaciones para un gran número de familias de la capital.
Actualmente se encuentran ya en Apoquindo algunas familias que aprovechando las fiestas de Pascua y Año Nuevo se han ido a pasar estos días a estos pintorescos baños, donde pueden pasar agradablemente y con toda comodidad.
 
Revista Zig-Zag 1913



 

EL AGUA MINERAL DE APOQUINDO
A un par de leguas al este de Santiago, al pie del primer cordón del terreno de los Andes, es un lugar ameno, alegre y bueno para la salud, salen del interior de la roca unos cuatro o cinco chorros de agua mineral, y bajan por la quebrada, mezclados con otro arroyo de agua pura, sin dejar en su camino ningún deposito de sales o florescencias salinas. El lugar, a pesar de su admirable situación, esta desamparado, solitario, mas descuidado que los baños de las cordilleras más ásperas y remotas de las poblaciones. Unos escombros de arruinados ranchos y algunos palos desparramados en el suelo, señalan que antes solía morar por esos lugares alguna gente desvalida.

Estero Los Baños
 
El agua de Apoquindo es clara, cristalina, sin olor, de un sabor muy desagradable, difícil de describir; y abandonada a sí misma en una botella tapada, no forma ningún deposito. No es acida ni alcalina; no ejerce ninguna acción sobre los colores vegetales, y solamente haciéndola hervir aparecen sustancias salinas.

El agua del pozo grande en que se bañan, tiene una temperatura aproximada de 18°C a 23°C. Esta agua de gran virtud medicinal contra las enfermedades cutáneas se conoce bajo el nombre del agua de la sarna”.

Este pozo tiene como una media vara de hondura, y cuyo fondo es de arena, se ve el desarrollo intermitente de un gas, cuyas burbujas de diverso tamaño, se levantan de las diversas partes dl fondo mismo, en cantidad considerable, y rara vez pasan 15 a 20 segundos sin que en algún punto del fondo aparezcan dichas burbujas.

El agua de Apoquindo no tiene indicios de azufre y aun la proporción de sulfato de cal es muy pequeña. Esta agua, por su composición, se asemeja a la de Cauquenes; pero lo que hay más notable en la de Apoquindo es:

La gran cantidad de sales que ella contiene, que llegan casi al máximum que suelen contener las aguas minerales más cargadas de sales y mas enérgicas.
  1. La gran proporción de cloruro de calcio que hay en esta agua y que es mayor todavía que lo que hay de este cloruro en las aguas de Cauquenes.
  2. La ausencia casi completa de acido carbónico libre y de carbonatos.
Es de desear que a consecuencia del análisis del agua de Apoquindo y de los importantes datos que los facultativos de esta capital, esencialmente nuestros socios, los DD. Blest y Veillon, han recogido en el uso de esta agua, el Supremo Gobierno o la Municipalidad de Santiago promuevan levantar un establecimiento de baños en el lugar donde brotan dichos manantiales, construyendo casa cómodas para los enfermos y un hospital para los pobres, cuya mortandad espantosa debe antes de todo mover el celo de los verdaderos patriotas y amigos de la humanidad.

Ensayos sobre las aguas minerales de Chile,  Ignacio Domeyko publicada en la Revista de Santiago en 1848.